Camino y está oscuro, siento que no entiendo, nada que no voy a salir, pero creo que solo es mi mente que me traiciona entonces soy yo mismo que no entiendo que está pasando, que entre más avanzo más me confundo, pero necesito llegar a la claridad, necesito retomar mi fuerza, elegir seguir o quedarme ahí atrapado en lo que siento, en lo que evito sentir, por que si mis emociones son capaces de traicionarme, también tienen la capacidad de sacarme de aquí, de tomar mis pesadillas o miedos como obstáculos y hacerme creer que nada es real, o que todo tiene el poder de derribarme.
Siento tristeza, dolor, vergüenza, de sentir lo que siento, de querer de la forma en la que quiero, de soñar en la forma en la que sueño, de que mis deseos no estoy tanto seguro de que de verdad son lo que deseo. Entender que mis pasos me llevan hacia confiar en mi intuición, pero es tan doloroso seguir sin saber si vas como ciego aun pudiendo ver, ¿de qué no me doy cuenta, que no estoy percibiendo? ¿Qué me estoy negando a saber y creer?, cuantas vendas me he echado en los ojos, por que es tan complicado soltar y dejar atrás lo que sabes que te ayudó a estar aquí ahora, a veces son cascadas de emociones, ideas y pensamientos que son una carga que no me permite avanzar. Hice y fui en ese momento lo que tuve que ser, lo que elegí ser, donde elegí estar, lo que elegí sentir, no debería haber reproche o recelo, al final fui y estuve donde quise, con quien estuve y en esos momentos hice lo que tenía que hacer.
Logro avanzar, pero no sabré si voy bien, a menos que siga confiando en lo que soy y en la firmeza de mis decisiones, que aun siendo no tan buenas conllevan a un resultado y pienso “ya encontraré la forma de solucionarlo siempre lo hago”.